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¿Lista de cotejo o rúbrica? 3 Orientaciones para una elección adecuada.

El decreto n° 67/2018 trajo consigo un giro copernicano a la evaluación, pues la hizo parte fundamental de todo el proceso pedagógico, y ya no es solo parte del momento al final de una unidad o al final de un contenido donde los estudiantes rendían una prueba o realizaban algún trabajo grupal asociado a una calificación. Ahora, la evaluación, es parte íntegra, armónica y simbiótica de nuestro proceso pedagógico, naturalizando la utilización de instrumentos de evaluación para la recolección de evidencias. Frente a esto, los instrumentos más utilizados son la lista de cotejo y la rúbrica, pero ¿se pueden utilizar indistintamente? ¿Tienen la misma finalidad y/o función?

Los instrumentos de evaluación son herramientas pedagógicas que nos sirven para recolectar evidencias sobre el desempeño de nuestros estudiantes en diversas situaciones y actividades de aula que nos sirvan para retroalimentar y tomar decisiones profesionales que nos permitan alcanzar de manera eficaz y eficiente los objetivos de aprendizaje. 

La lista de cotejo y la rúbrica son parte fundamental de los instrumentos de evaluación por la cantidad de evidencias que nos pueden entregar de nuestros estudiantes para retroalimentarlos y luego tomar decisiones sobre el desempeño, sin embargo, existen ciertas dudas sobre las diferencias que hay entre los instrumentos y sus formas de aplicación, veamos estas diferencias y algunas orientaciones para aplicarlo: 

 

Rúbrica 

Lista de cotejo 

Instrumento de evaluación que permite evaluar diferentes niveles de logro de un criterio o indicador específico a través de rangos delimitados que indiquen el desempeño explícito de nuestros estudiantes. 

Instrumento de evaluación que permite evaluar la ausencia o presencia de un indicador y/o criterio específico redactados a modo de acciones que realizarán nuestros estudiantes. 

 

En qué momento aplicar cada uno de estos instrumentos es un tema que ronda en la cabeza de muchos de nosotros, sin embargo, existen algunas orientaciones específicas para aplacarlos y, así, tener el mejor instrumento para situaciones de desempeño específicas de nuestros estudiantes, estas son: 

Dentro de una situación de desempeño (afiche, debate, exposición oral, podcast, póster académico, representación teatral, etc.) es preferible utilizar una lista de cotejo para la estructura de la actividad y una rúbrica para el desempeño específico de los estudiantes en la actividad, asignando cierto % de la evaluación a cada uno ellos.

Para actividades acotadas es mejor la utilización de una lista de cotejo, pues entrega información más rápida sobre elementos que se quieren visualizar; pues cumplirían el rol de indicadores de logro o de evaluación, mientras que la rúbrica puede ser utilizada para observar sutilezas o elementos más detallados del desempeño de nuestros estudiantes.

Cuando quieras evaluar una secuencia de acciones o indicadores es mejor utilizar una lista de cotejo que permite construir un “manual de instrucciones” para los estudiantes, ya que la rúbrica está enfocada de evaluar criterios que van conformando una idea general del desempeño del estudiante.

Para finalizar, es importante recalcar que independiente del instrumento de evaluación que utilicemos, la finalidad es recolectar evidencias de nuestros estudiantes que nos permitan retroalimentarlos eficazmente para que logren aprendizajes significativos que los ayuden a ser ciudadanos comprometidos y responsables con la sociedad.

Para saber más:   

Adjuntamos ejemplos de listas de cotejo y de rúbrica

Blog ATE SM 

Libro: 

Ruay Garcés, E. & Garcés, J.L. (2015) Diseño y construcción de instrumentos de evaluación de aprendizajes y competencias. Editorial Redlpe: Colombia. 

Escrito por Julio Caro, Profesor de Filosofía, Magíster en Currículum y Evaluación. Coordinador Pedagógico en Fundación ATE SM.

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